Las colchas con telas recicladas son una excelente opción para aquellos que buscan una forma creativa y sostenible de confeccionar colchas y edredones. Además de contribuir al cuidado del medio ambiente, utilizar telas recicladas permite darle una segunda vida a materiales que de otra manera terminarían en la basura.
Cuál es la mejor tela para una colcha
A la hora de elegir la tela para una colcha, tener en cuenta diversos factores. La durabilidad y resistencia de la tela son fundamentales para asegurar que la colcha se mantenga en buen estado a lo largo del tiempo. Algunas opciones populares incluyen el algodón, el lino y el poliéster.
El algodón es una elección clásica para colchas debido a su suavidad y transpirabilidad. Además, es fácil de trabajar y se puede encontrar en una amplia variedad de diseños y colores.
El lino es otra opción popular, conocido por su durabilidad y resistencia. Aunque puede arrugarse con facilidad, el lino le da a las colchas un aspecto rústico y elegante.
El poliéster es una opción más económica y resistente a las arrugas. Aunque puede no ser tan transpirable como el algodón o el lino, el poliéster es fácil de cuidar y se seca rápidamente.
¿Qué es un fat quarter?
Al buscar telas y materiales para confeccionar colchas y edredones, puede que te cruces con la palabra fat-quarter. Se trata de una medida americana de corte de tela que se usa habitualmente para vender algodón acolchado. Mide exactamente 45x55 cm, es decir, en lugar de ser tiras delgadas y alargadas, se trata más bien de un rectángulo. Para obtenerlo, se corta una yarda de tela (0,91 cm) por la mitad a lo largo y, luego, cada segmento se vuele a cortar por la mitad a lo ancho. Esto proporciona a los amantes de la confección de edredones una forma de tela más versátil con la que trabajar sin tener que comprar más tela de la que realmente se necesita.
Reciclar ropa: moda sostenible para cuidar el planeta¿Es necesario lavar la tela antes de confeccionar un edredón?
A diferencia de lo que ocurre con la confección de prendas de ropa, para elaborar edredones y acolchados no es necesario lavar primero la tela. Esto es una buena noticia porque la tela seguirá teniendo ese acabado impecable, como recién salida de la tienda. Además, hará que te resulte más fácil cortarla sin tener que plancharla primero. Una vez terminada la confección, lavar la creación final te ayudará a aportarle una apariencia más suave y un tacto más uniforme. La excepción es si usas colores vivos que temes que puedan desteñir. Prelavar telas con colores intensos (como rojo o azul) te ayudará a evitar que destiñan o manchen zonas más claras de la colcha y arruinen todo el esfuerzo y trabajo que has puesto en ello.
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